En mi última visita a Mendoza recibí una invitación muy especial por parte de la bodega Nieto Senetiner. La propuesta incluía cabalgata por la estancia, visita guiada por la bodega, degustación de vinos y almuerzo. Naturalmente, no me pude resistir. 🙂
Por culpa de mi rodilla operada no pude realizar la cabalgata. Pero se la recomiendo a quien pueda hacerla, ya que es una actividad encantadora: se recorren los viñedos y se asciende al cerro Melón desde el cual se tiene una vista maravillosa del valle de Vistalba.
Desde el primer momento en que llegamos a la bodega, nos sentimos como en casa. El ambiente es muy agradable y acogedor, y si hay algo que abunda, son las sonrisas: “bienvenidos”, “bienvenidos”, “bienvenidos”, escuchamos por doquier. Luego de disfrutar de un exquisito café conocimos a Marcelo, jefe de bodega y muy cálido anfitrión, que muy amablemente nos contó sobre la bodega y nos presentó a Johanna, quien sería nuestra guía en la visita por el predio.
Johanna nos acompañó a recorrer los viñedos, explicándonos detalladamente cada uno de los varietales que allí se cosechan, las peculiaridades del cultivo de cada tipo de uva y como eso hace la diferencia en cuanto a la producción del vino. Además de todos los conocimientos que estábamos incorporando, nos maravillaba la imponencia del paisaje. La vid, el sol, la montaña… una vista que hace gala a la belleza de lo simple, lo trasciende, y emociona.
Nuestro recorrido siguió por la zona de producción, donde pudimos apreciar las distintas etapas por las que pasa una uva hasta llegar a la copa. Se trata de un proceso cargado de conocimiento, sabiduría, paciencia y pasión. Esos son los componentes que -a mi criterio- revisten de prestigio el mundo del vino. Johanna nos contó sobre los distintos varietales, las particularidades de la cosecha, las diferencias en el añejamiento y respondió amablemente cada una de nuestras preguntas.
Luego, llegó el momento que más despertaba mi curiosidad: la degustación de vinos y chocolates. La dinámica consistía en probar primero un varietal, luego comer un trocito de chocolate y volver a degustar el vino, descubriendo nuevos sabores y ampliando el paladar. Las combinaciones fueron sublimes:
- Chocolate con naranja. Maridaje: Don Nicanor Chardonnay
- Chocolate con frutos rojos. Maridaje: Don Nicanor Bonarda
- Chocolate con café. Maridaje: Don Nicanor Malbec
- Chocolate Amargo. Maridaje: Don Nicanor Cosecha Tardía Malbec
Si hablamos de delicias, un capítulo aparte merece el almuerzo de asado criollo.
La recepción consistía en una variedad de panes con ceviche, paté de conejo y tapenade de aceitunas negras, acompañados de un delicioso Nieto Senetiner Grand Cuvée Brut Nature.
Al momento de la entrada llegaron las empanadas de sabores criollos, acompañadas por un Don Nicanor Chardonnay Viognier.
El asado no demoró en llegar. Achuras, carnes, de lo más deliciosas y todo cocido al punto elegido por cada comensal, acompañadas de papas rústicas y variedad de ensaladas, se puede pedir algo más? Si, el maridaje con un exquisito Don Nicanor Malbec.
Como si todo esto fuera poco, llegó el momento -sagrado- del postre: yo elegí un brownie con mousse de chocolate blanco y Pato optó por las peras al vino con helado. A cuál más rico! Imposible decidirse! Les recomiendo por experiencia propia, combinarlos con el Nieto Senetiner Grand Cuvée Extra Brut.
Luego de un exquisito café, dimos un paseo por los viñedos disfrutando del sol y la paz del entorno. Nos costó despedirnos de un lugar tan maravilloso, pero prometimos volver! También aprovechamos para comprar vinos y espumantes, y así poder revivir luego, a través de los sabores, los momentos más deliciosos de una jornada inolvidable.
Quiero agradecer de todo corazón a la bodega por su amabilidad, su generosidad y la hospitalidad con la que nos recibieron. Gracias por hacernos sentir como en casa y brindarnos una experiencia sensacional! Esperamos volver a verlos pronto!
3 respuestas a “Almuerzo, degustación de vinos y chocolates y más en la Bodega Nieto Senetiner, Mendoza”
Antes no ponían chocolate, que rico!!!
Si, realmente la degustación con chocolate cambia toda la experiencia! Habrá que volver para probarla 😉
[…] gratamente con su servicio. Conocimos Potrerillos, visitamos las bodegas Pulenta Estate y Nieto Senetiner, recorrimos la ciudad y sus parques y comimos como los […]